Los presos políticos pierden la salud mientras esperan sus juicios
El famoso empresario Aliaksandr Vasilevich, copropietario del holding publicitario Vondel/Hepta, los portales kyky.org y the-village.me (ambos están bloqueados en Belarús), así como la galería «Ў» [«u breve» – NT], que proporcionó sus instalaciones de forma gratuita para el almacén de la iniciativa voluntaria ByCovid19 para ayudar a los médicos belarusos. Lleva 10 meses en prisión, presuntamente bajo sospecha de un delito penal: evasión de impuestos. Pero es obvio que las afirmaciones de las autoridades sobre Aliaksandr son políticas: estuvo en la reunión con Lukashenka en el centro de detención preventiva, cuando se vio con sus principales oponentes políticos: Viktar Babaryka, Siarhei Tsikhanouski y otros representantes de la oposición.
Durante la estadía de Vasilevich en prisión, su salud se deterioró enormemente: enfermó de covid, sus ojos están constantemente supurados, tiene los ligamentos de la pierna desgarrados, necesita una operación. Su esposa Nadzeya Zelenkova y sus dos hijas se vieron obligadas a abandonar Belarús y emigrar a Estonia. En su opinión, en Belarús no existe ningún derecho. Primero se encarcela a las personas y luego se les ocurren las razones por las que fueron encarceladas.