El político Anatol Liabedzka fue puesto en libertad tras 30 días de arresto administrativo
El político fue detenido el 14 de mayo, cuando acudió a apoyar a los imputados en el caso de los estudiantes, y fue sentenciado a 30 días de arresto. Hoy se suponía que Anatol sería liberado, pero a su mujer le dijeron que no estaba en el centro de incomunicación de detenidos, ya que había sido puesto en libertad ya. Más tarde se supo que a Liabedzka le habían sacado en secreto del centro que se ubica en la calle Akrestsina y le habían dejado a las afueras de Minsk. Llegó a casa en taxi.
Anatol Liabedzka compartió con NN.BY sus impresiones de la estancia en el centro de prisión preventiva.
«Sería muy bueno que aquellos que hacen declaraciones políticas en nombre de Belarús simplemente visitasen las prisiones preventivas y los centros de incomunicación de detenidos de hoy. Sería muy interesante, porque lo que está pasando allí ahora es una violación diaria de la Constitución vigente. Allí se da una constante tortura de personas si nos basamos en los estándares internacionales y la Constitución. Es allí donde la gente hoy se siente más incómoda y más en peligro. Ni siquiera se puede comparar con las colonias penitenciarias y cárceles belarusas. Es incluso más fácil para quienes han pasado por causas penales», dijo el político.
Anatol habló sobre las condiciones de detención en la prisión preventiva: «Ahora hay entre 15 y 19 personas en celdas de dos o cuatro camas. Solo hubo cuatro o cinco días en los que hubo agua caliente. Las personas se instalan en celdas donde no hay nada de aire, ya que todo está cerrado. Durante dos días estuve en la celda de castigo, ni siquiera sé por qué, nadie le explica nada a nadie allí. No hay almohadas, ni fundas de almohada, ni colchones, nada».